Jornada de pesca en el río Pu

Buenos días Cicely! Acaba de llegar a la emisora el delicioso paquete de periódica sabiduría oriental, y aun estoy paladeando el aroma de sus letras. Cuatro nuevos títulos jugosos q engrosan una colección de libros q se empeñan en dejar de leerse. Y en eso estamos, intentando dejar de leerlos. Pero por el momento el apego por el mundo de samsara sigue presente. En este orden de cosas, uno de los títulos es el "Zhuang Zi", el cual al abrirlo por primera vez me he encontrado con este pequeño relato q ha logrado sacarme una sonrisa, y q por lo cual me he decido en compartirlo con ustedes.

Estaba Zhuang Zi pescando en el río Pu, cuando el rey de Chu despachó a dos de sus altos diganatarios para que le comunicaran su intención: - "¡Es mi deseo confiarle la carga de este, mi país!" - Zhuang Zi, sin soltar la caña ni tornar la cabeza, les dijo:
- "Tengo oído que en Chu hay una tortuga prodigiosa, que murió hace tres mil años. Vuestro rey la guarda en el salón noble de su palacio, envuelta en un paño y dentro de un cofre de bambú. Esa tortuga, ¿quiso morir para que sus huesos fueran venerados, o hubiese preferido seguir viva aun arrastrando su cola por el fango?"
- "Hubiese preferido seguir viva aun arrastrando su cola por el fango" - respondieron los dignatarios.
- "¡Marchaos ya!" -dijo Zhuang Zi-. También yo prefiero arrastrar mi cola por el fango."

Amén hermano...